¿Cómo afecta la pérdida auditiva al cerebro?

El cerebro es el centro de operaciones de todo nuestro cuerpo, pero puede verse afectado por dolencias tanto físicas como intangibles. Si bien la pérdida auditiva afecta nuestra capacidad para oir, también puede provocar cambios en el cerebro.

La pérdida de audición puede ocurrir en cualquier persona, sin importar su edad o raza. Debido a que la pérdida auditiva afecta tantos aspectos de la vida de las personas, se han realizado muchos estudios para explorar cómo cambia el cerebro. Los resultados son interesantes y muestran cuánto puede alterar el cerebro para compensar los sentidos perdidos. La neuroplasticidad se refiere a la reconfiguración del cerebro para manejar nuevas funciones y situaciones. En las personas con pérdida auditiva, el cerebro se reconecta de varias maneras, hasta sus funciones superiores.

Reorganización cortical intermodal

A pesar del nombre largo, en realidad no es un proceso complicado. Cuando se produce una pérdida auditiva, el cerebro tiene que compensar en exceso este sentido perdido de alguna manera. Al poner énfasis adicional en otros sentidos como el tacto y la vista, este proceso conduce a la fatiga y afecta negativamente a la concentración.

Si bien esto puede ayudar a las personas con problemas de audición a sobrellevar hasta cierto punto la pérdida de la audición, puede tener efectos perjudiciales para la función cerebral. Por ejemplo, cuando una persona experimenta pérdida de audición, el área del cerebro que procesa el sonido comienza a deteriorarse. Esto conduce a problemas para comprender el habla y el lenguaje. Debido a que el cerebro tiene que compensar en exceso estas funciones cerebrales debilitadas, el pensamiento de alto nivel se pierde para la comprensión del habla. Esto puede conducir a una serie de otros problemas, incluida la posible aceleración de la demencia.

Cómo pueden ayudar los audífonos

En la mayoría de los casos, la pérdida de audición es un proceso gradual. Esto hace que sea difícil de identificar, ya que es posible que la persona ni siquiera se dé cuenta de que ya no puede escuchar ciertos sonidos. De hecho, el cerebro puede almacenar recuerdos de sonidos durante varios años. Después de esto, comienzan a olvidar los sonidos por completo.

Los audífonos permiten a las personas oír correctamente, estimulando los centros auditivos en sus cerebros. Las funciones superiores del cerebro pueden continuar con su propósito previsto y no tienen que compensar en exceso los sentidos que fallan.

Buscar tratamiento temprano

La intervención en las primeras etapas de la pérdida auditiva también puede prevenir la reorganización del cerebro. Debido a que la pérdida auditiva se corrige temprano, no es necesario que el cerebro se reconfigure para reforzar otros sentidos. El usuario de audífonos puede beneficiarse de la estimulación del sonido, mientras mantiene una estructura cerebral saludable.

A pesar de la importancia de la intervención temprana, muchas personas que sufren pérdida auditiva no buscan tratamiento. Algunos ni siquiera reconocen que sufren pérdida auditiva, mientras que otros evitan afrontar el problema por motivos personales. Pasan años preciosos antes de que muchas personas con problemas de audición comiencen a buscar ayuda para su condición. Pueden pasar muchas cosas al cerebro de una persona en siete años, y gran parte de este deterioro es fácilmente prevenible.

¿La solución? Sensibilización y proactividad frente a la pérdida auditiva. Todos, no solo aquellos con pérdida auditiva, deben hacerse una prueba de audición con regularidad. Las pruebas en línea pueden ofrecer una primera buena idea de si es necesaria o no una prueba completa con un audioprotesista. La prueba de audición Signia es un buen ejemplo de una prueba de audición en línea rápida y confiable.

La pérdida de audición afecta más que solo su vida, también altera su cerebro. Si cree que podría estar perdiendo la audición, busque un diagnóstico.